El gobierno del presidente Evo Morales Ayma es el que ha instaurado el pleno respeto a la vigencia de los derechos humanos desde el reencaminamiento de Bolivia a la democracia, manifestó el lunes el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti.
Llorenti se encuentra en la capital de Estados Unidos para reunirse con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); un organismo de la Organización de Estados Americanos (OEA), para evaluar el avance del respeto a la vigencia de estos derechos en Bolivia.-
“Como en ningún momento de la historia de Bolivia, el actual Gobierno es el que más se ha abierto y cooperado a los organismos internacionales de derechos humanos”, señaló Llorenti.
Subrayó que, por ejemplo, ha autorizado que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas instale una oficina en Bolivia, además de que delegados de la CIDH han visitado en varias ocasiones el país a invitación del Gobierno.
Llorenti se reunirá las próximas horas con los integrantes de la CIDH en una audiencia que ha sido gestionada por las autoridades.
Aclaró que bajo ninguna circunstancia esta audiencia se cumplirá en forma conjunta con una delegación de políticos de oposición, encabezada por los senadores de Poder Democrático y Social (PODEMOS), Luis Vásquez, Oscar Ortiz y Roger Pinto.
El Viceministro destacó que ha sido el Estado el que ha pedido una audiencia a la CIDH para hacer seguimiento a un trabajo conjunto sobre las acciones desarrolladas en Bolivia para dar mayor acceso a la justicia y promover la inclusión social contra la discriminación.
Dijo que los organismos internacionales han reconocido públicamente los esfuerzos que hace el Estado en materia de inclusión social de los pueblos indígenas, mujeres, discapacitados y otros sectores para el pleno goce de sus derechos constitucionales.
Reiteró que en estos poco más de tres años y medio del Gobierno de Morales “sin duda que ha mejorado la situación del respeto a los derechos humanos en Bolivia”.
Sin embargo reconoció que son necesarios mayores esfuerzos para aplicar los mandatos de la nueva Constitución Política del Estado y superar algunas de las limitaciones para evitar que una innumerable cantidad de casos no queden en la impunidad.
“Estamos en Washington en representación del Estado para mostrar al mundo los avances que ha tenido Bolivia en la preservación y vigencia de los derechos humanos”, afirmó.
Agregó que las autoridades ven con sorpresa que grupos de oposición hayan solicitado una audiencia a la CIDH para denunciar supuestas violaciones a los derechos humanos.
“Considero que han venido (los senadores de la oposición) en condición de candidatos a hacer campaña y no a aclarar nada”, señaló.
Puntualizó “a estos señores no les interesa tanto la audiencia con la CIDH como hacer un show mediático antes que velar por el respeto a los derechos humanos”, aunque dijo que ve con complacencia que “estos individuos estén reconociendo la existencia de instancias internacionales de derechos humanos”.
Llorenti manifestó que las personas que han defendido siempre la vigencia de los derechos humanos saben que en el pasado se hizo muy poco para garantizar su vigencia y, contrariamente, se los violó en forma constante, se incurrió en la persecución política y en otros excesos.
Subrayó que por ello llama la atención que aquellos que integraron esos gobiernos pretendan autoproclamarse ahora como defensores de los derechos humanos.
“Al pueblo no podrán engañarlo porque estos señores son conocidos por sus actitudes intolerantes cuando ejercieron los poderes central y regional”, dijo.
“Estas personas (los senadores de oposición) utilizan cualquier pretexto o excusa para venir a Washington, que es donde vive el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada o a Miami, donde está el ex ministro Carlos Sánchez Berzaín”, anotó.
Indicó que es preciso recordar que el hijo del ex presidente Víctor Paz Estensoro, Ramiro Paz Cerruto, denunció que el principal financiador de la campaña electoral de la oposición era Gonzalo Sánchez de Lozada, quien se ha negado a responder por los delitos que se le acusa en un juicio de responsabilidades que se sustancia en la Corte Suprema de Justicia.
“Son las paradojas de la vida que sean los acusados de hechos delictivos a reclamar por la vigencia de los derechos humanos, pero no pueden engañar al pueblo boliviano que sabe quiénes han defendido la vida y luchado por la consolidación de una revolución democrática y cultural que son diferentes a los que al frente de gobiernos neoliberales violaron la Constitución y los derechos humanos, con represión, violencia y persecución política, como sucedió en los Gobiernos de Sánchez de Lozada, Hugo Banzer y Jorge Quiroga.
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