El calentamiento del planeta podría ser peor de lo previsto y alcanzar siete grados en 2100, según un grupo de 24 expertos climáticos que subrayaron, antes de la cumbre de Copenhague en diciembre, la necesidad de acciones rápidas y eficaces.
El Instituto de Investigación sobre los Impactos del Clima de Potsdam, en Alemania, publica un documento de 64 páginas que sintetiza los trabajos científicos sobre el calentamiento global, aparecidos desde el cuarto informe (2007) del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) y va acompañado de un llamamiento a la acción.
El aumento de un 40 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) entre 1990 y 2008 hace más difícil de alcanzar el objetivo que se fijaron los dirigentes de algunos países desarrollados y emergentes de limitar a dos grados el calentamiento del planeta.
“Cada año de retraso en la acción aumenta las posibilidades de que el calentamiento sobrepase los dos grados centígrados”, advierten los estudiosos.
Según Hans Joachim Schellnhuber, director del Instituto de Potsdam y miembro del IPCC, el informe es “un último llamamiento de los científicos a los negociadores sobre el clima de los 192 países que deben hacerse cargo de la protección del planeta en Copenhague”.
“Deben saber la verdad, sin tapujos, sobre el calentamiento del planeta y los riesgos sin precedentes que implica”, subraya Schellnhuber.
A aquéllos que aún dudan sobre el origen humano del calentamiento, el documento de Potsdam recuerda que durante el primer cuarto del siglo XX las temperaturas medias aumentaron de 0,19 grados por decenio, lo que corresponde perfectamente a las previsiones calculadas con base en las emisiones de gas con efecto invernadero.
Uno de los efectos más alarmantes del cambio climático es la multiplicación de los fenómenos meteorológicos extremos, tanto a nivel de temperaturas como de precipitaciones (sequías o inundaciones).
Otro fenómeno afecta a la elevación del nivel de los mares.
“La actual subida del nivel de los mares”, de 3,4 milímetros por gestión durante los últimos 15 años, “es superior en un 80% a las previsiones realizadas por el IPCC”, señala.
El deshielo de los glaciares árticos, un 40% más rápido que lo previsto por el IPCC, significa también que los océanos absorberán más calor del sol lo que, a su vez, acelerará el deshielo de los polos.
http://www.cambio.bo/noticia.php?fecha=2009-11-30&idn=11316