El fiscal del caso de la masacre de estudiantes normalistas y campesinos en Porvenir, Eduardo Morales, informó este jueves que los sospechosos de la matanza colectiva que fugaron a Brasil no pueden ser declarados rebeldes, aunque no explicó los motivos.
Mary Carrasco, abogada de las víctimas de Porvenir, agregó que el principal sospechoso el ex prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, y sus cómplices acuden a las chicanas jurídicas recusando a los jueces en Pando y en La Paz, con lo que estarían obstruyendo la presentación de la solicitud de declaratoria de rebeldía de 56 prófugos.
En la actualidad existen cuatro detenidos por el caso, más de cincuenta identificados como presuntos responsables con mandamientos de aprehensión y más de 60 personas son imputadas por delitos de terrorismo y asesinato, indicó Carrasco.
El 11 de septiembre de 2008, más de 10 personas, en su mayoría campesinas, fueron brutalmente masacradas en la localidad pandina de Porvenir e inmediaciones cuando se dirigían a una concentración del sector en la ciudad de Cobija.
Según los primeros indicios de las investigaciones, un grupo de cívicos y algunos funcionarios de la prefectura pandina, que entonces estaba a la cabeza del ahora encarcelado ex prefecto Fernández, habrían impedido el paso de los campesinos cavando en el camino una zanja e incluso recurriendo a una brutal masacre.
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