Una comisión de representantes del Gobierno de Brasil llegó ayer a Cobija para verificar las condiciones en que viven sus ciudadanos que deben abandonar el territorio nacional antes de diciembre del presente año, por encontrarse instalados dentro de la franja de 50 kilómetros desde la frontera en los que la Constitución prohíbe que los extranjeros tengan propiedades.
En declaraciones a la red PAT, una funcionaria brasileña aseguró que su país está de acuerdo con cumplir con la Constitución boliviana, pero quiere que el desalojo de sus ciudadanos sea pacífico y ordenado. Por ello, se desplazarán hasta las zonas para hablar con ellos y conocer sus necesidades.
http://www.eldeber.com.bo/2009/2009-08-21/vernotanacional.php?id=090820224132